En mis
propias palabras, explico que esto es algo que tuve que haber publicado el 30 de Abril del 2016, pero como soy una
persona que sufre de algo llamado paja “Síndrome de pereza”, publico
esto el día de hoy, el cual es 15 de
Mayo del 2016, casi 15 días después de la fecha en la que tendría que
haberlo dejado aquí en el blog. Terminando con esta nota casi innecesaria,
podemos proseguir.
Buenos días, tardes y noches para todos. Este día de hoy
publico la última reseña escrita por mí para todos ustedes, los cuales imagino
serán unos pocos. xD
En este caso es, como podrán haber leído, del anime de la
temporada de Invierno 2016, la cual no tuvo una buena cantidad de sorpresas,
así que podríamos considerar esta como la mayor de todas de dicha temporada.
Este anime está dirigido por el señor Shinichi Omata/Mamoru Hatakeyama (Guionista y director de episodios
en Arakawa
under the Bridge y Madoka Magica)
bajo el estudio de animación DEEN. Y
leyeron muy bien, esto lo hizo ni nada más ni nada menos que un Ex-SHAFT y DEEN, el cual es un estudio
conocido más por sus malas pasadas en la industria (PUPA, s2 y s3 de Jigoku Shoujo,
R.O.D
[2003]…) que por las alegrías que le dio a la gente (Ranma
½, Angel’s Egg, Urusei Yatsura…). A pesar de que
cuenta con cierta infravalorización de este lado del charco y de las críticas
que podríamos llegar a hacerle al pobre DEEN, Showa Genroku Rakugo Shinju (abreviado SGRS desde este momento por razones obvias) es hasta el momento la
mejor serie del 2016. “¿Cómo es que podés decir eso?” preguntarán. La respuesta
se las doy a continuación.